La importancia de la educación emocional.

El Monstruo de Colores, Ana Llenas Serra. 

Aquí os dejo un recurso para poder trabajar las emociones, el cuento El monstruo de los colores. Los alumnos desde pequeños pueden poner nombre y conocer sus emociones. Aprenderán con el Monstruo de Colores a ver la alegría, la tristeza, la rabia, la clama y el miedo. 

También os dejo la canción del monstruo de colores que a los más pequeños les encanta. 

Letra

Vaya que lío, con las emociones

que tiene el monstruo de los colores

Vaya que lío, con las emociones

que tiene el monstruo de los colores.

Amarilla es la alegría;

la tristeza es azul;

la ira será roja

siempre que te enfades tú.

Vaya qué lío, con las emociones

que tiene el monstruo de los colores.

Vaya qué lío, con las emociones

que tiene el monstruo de los colores.

Pintarás de negro el miedo;

y la calma verde es

Y si estás enamorado;

Será rosa tu pared.

Vaya qué lío con las emociones,

que tiene el monstruo de los colores.

Vaya qué lío, con las emociones

que tiene el monstruo de los colores.

Como educar desde el amor.

Educar no siempre es una tarea fácil, pero aquí vamos a darte unas pautas para que se haga más sencillo. Educar con amor es la clave para que haya un buen desarrollo y favorezca el bienestar de todos. Educar a través del amor es beneficioso porque ayuda a tolerar los fracasos, poder afrontar los retos y lograr los objetivos. 

5 consejos para educar a través del amor. 

1. Es importante conocer al niño/a. Es necesario saber cómo piensa, siente, cuáles son sus sentimientos y emociones, que miedos e inseguridades tiene, que cosas le motivan y le produce alegría. 

2. Respetar su forma de ser. Cada niño es único, no hay que juzgar ni etiquetar. Ya que los más pequeños se dan cuenta de absolutamente todo, hay que vigilar la forma de tratarlos porque se pueden sentir inferiores. Por eso es necesario aceptarle y valorarle tal y como es. 

3. Ofrecer muestras de afecto, es importante ser cercanos con ellos, darles caricias, sonrisas, palabras agradables, siempre una comunicación activa donde el alumno se sienta escuchado y le den un refuerzo positivo a lo que haga. 

4. Darle espacio para que exprese sus emociones. Hay que darles espacio para que se sientan seguros y cómodos, crear un ambiente donde puedan hablar de sus emociones y no se sientan juzgados. Por eso es necesario que desde pequeños hablen de las emociones que están sintiendo, las buenas y las malas, para que puedan trabajarlas. 

5. Generar una comunicación activa. No basta con tener afecto, es necesario  que perciba el afecto pero es mas importante que ellos perciban que pueden hablar y que no van a ser juzgados, si no que van a ser escuchados y atendidos.